Entre las herramientas más poderosas de la astrología se encuentra el estudio de la carta astral. Gracias a ella, los astrólogos pueden analizar el carácter, las virtudes, los defectos o las cualidades de una persona. Para calcular la carta astral es necesario saber el día, mes, año, hora exacta y el lugar donde llegamos a la vida. Porque aunque dos personas hayan nacido en el mismo momento, pero en lugares distintos, la carta astral es diferente, porque es única para cada uno.
Del mismo modo la carta astral sirve para indicar fechas importantes y elaborar el horóscopo. Digamos que es, como si tomáramos una imagen del firmamento, justo en el momento de nuestro nacimiento. Pero hay más que decir acerca de ella…
La carta astral
La carta astral está compuesta por los 12 signos del zodíaco, los planetas del sistema solar y la Luna, de los ángulos que forman entre ellos y de las 12 casas, siendo la primera la ascendente. Teniendo en cuenta estos elementos, la astrología puede ayudarnos a saber cómo somos, para qué valemos y qué nos puede deparar el futuro.
La posición de los Planetas en nuestra Carta Astral
La posición de los planetas en el momento que nacemos, es uno de los elementos esenciales a los que recurre el astrólogo para elaborar la carta astral. En astrología, en la categoría de planetas se considera tanto Mercurio, Venus, Marte, Júpiter y Saturno, como al Sol y la Luna. Además, se añaden los planetas invisibles al ojo humano, como Ceres, Urano, Plutón y Neptuno.
Para los astrólogos, cada planeta tiene un significado diferente. ¿Quieres saber qué cualidades se le atribuye a cada uno?
Venus: Representa el amor y la belleza. Indica la forma en la que nos relacionamos con los demás, cómo amamos y cómo queremos que nos amen. También es aquello que queremos conseguir en la vida. Son los placeres sensuales y la sexualidad en libertad.
Mercurio: Es la inteligencia, el aprendizaje y la comunicación. Establece las pautas de cómo transmitimos nuestros mensajes y cómo aprendemos. Está vinculado a nuestros procesos intelectuales.
Júpiter: Es la forma en que la persona interpreta la vida y le da significado a la misma. Está vinculado con los viajes, las creencias religiosas y la filosofía de vida que cada uno adopte para manejarse en el mundo. También está asociado a la sociabilidad.
Marte: Simboliza el espíritu guerrero que todos llevamos dentro. Es la lucha por los ideales y por prevalecer en el mundo. Potencia la capacidad de decisión y la iniciativa. Ningún proyecto se queda atrás ante la presencia de este planeta. Impulsa los inicios.
Saturno: Es el sentido de responsabilidad que se tiene ante la sociedad. Lo material prevalece ante lo espiritual. El deber es lo importante y después vendrá el placer. Favorece la concentración y otorga la perseverancia que se necesita para lograr encontrar un lugar en el mundo.
Neptuno: Es el planeta de la intuición. Nos ayuda a comprender la razón de las situaciones que nos pasan y nos acerca a los demás gracias a que nos brinda la empatía necesaria para comprender los problemas y dolencia ajenas. Nos vuelve dadivosos y comprensivos.
Urano: Nos da la creatividad necesaria para construir en libertad. Otorga independencia y la rebeldía que necesitamos para romper el molde y ser nosotros mismos.
Plutón: Es el planeta que nos vuelve versátiles para que desarrollemos nuestra capacidad de transformación. Propicia el cambio y la evolución.
Sol: Es el astro que simboliza la esencia de uno mismo. También potencia la paternidad y el trabajo. Nos ayuda a sobresalir y a superarnos a nosotros mismos.
Luna: Alberga el lado femenino de las persona y representa las emociones con su lado bueno y malo. Genera cambios de humor.
Ceres: Es el planeta de la nutrición y alimentación. Controla las estaciones y la agricultura.
